Si bien es importante comprender el mercado y los sistemas comerciales, más importante es la mentalidad del comerciante: cómo maneja sus emociones y cómo lidiar con las pérdidas. Es probable que los compradores llamen a todos los que se vean bien si hay varios. El miedo, la confusión, la ira, la codicia, la frustración, lo dices tú. La percepción y la base de un cliente comercial dependen en gran medida del resultado de sus transacciones, lo que puede afectar su éxito general.
Cuando un comerciante entra en un ciclo de malas transacciones y sanciones no rentables, puede ser difícil salir de él y manejar la situación de manera efectiva. Echemos un vistazo a los factores que dan forma a la opinión de un comerciante y veamos qué puede hacer para mejorarla.
entender el miedo
El miedo a la pérdida surge de la comprensión. Sin embargo, es extremadamente doloroso porque priva al emprendedor de la oportunidad de tomar la decisión correcta y puede causar miedo, ira y frustración. Es importante entender que el miedo es una respuesta normal a una amenaza. El miedo no siempre refleja la gravedad de la situación: el miedo suele ser exagerado e innecesario.
Otro tipo de miedo es el FOMO, miedo a la pérdida. Esto obliga al emprendedor a tomar decisiones rápidas por temor a no aprovechar lo que parece estar haciendo todo el mundo a su alrededor. Los comerciantes de FOMO pueden comerciar más porque no entienden el mercado y sus elecciones causan ansiedad e incertidumbre.
Lucha con la codicia
Otra gran codicia es la medida de las emociones de un hombre de negocios. Este deseo alienta a los comerciantes a tomar el mayor riesgo posible, por ejemplo, un negocio exitoso continúa hasta que la situación cambia y los resultados cambian. Cuando la codicia es fuerte, puede ser catastrófica.
Combatir la codicia no es fácil y rara vez se controla por completo. “¡Si abro otra tienda, puedo lograr que suceda mucho mejor! Como siempre, el pensamiento surgirá. Sin embargo, reconocer y reflejar tales pensamientos es un paso hacia un sistema de marketing avanzado.
¿Cómo estás de acuerdo?
La gestión de las emociones es un trabajo que debe ser una prioridad. Para mantener saludable una transacción mental, debe crear un conjunto de reglas y seguirlas. Dichas reglas pueden incluir objetivos tales como medidas de gestión de riesgos como el resultado final de los objetivos del comerciante, la prevención de pérdidas y el equilibrio comercial. Puede contener detalles de un plan de negocios que explique los términos de entrada y salida. Puede establecer la cantidad de daño y el resultado deseado para un día.
Tales reglas pueden ayudar a un empresario a determinar la importancia de un rol en particular, lo que puede ser una guía en tiempos de confusión emocional. En tiempos de miedo o codicia, puede ser conveniente seguir las reglas y evaluar las preferencias del comerciante en lugar de un plan escrito.
Qué más se puede hacer?
Además de establecer reglas, los comerciantes pueden realizar un seguimiento de su trabajo y evaluarlo de manera oportuna. También puede ayudarlo a conocer su estado emocional, ya que le permite planificar futuras emociones negativas. Regrese al proceso de negociación y aplique el método actual al método eficiente utilizado por la mayoría de los comerciantes.
Adquirir habilidades comerciales profesionales también puede ayudar a controlar el mal comportamiento: es posible que los nuevos operadores deseen dedicar más tiempo a ello. Investigación de mercado. Esto les ayudará a ganar más confianza y reducir el estrés.